El Comercio Justo impulsa relaciones laborales justas, que promueven el respeto a los derechos los(as) trabajadores(as), a través de la promoción de condiciones de Trabajo Decente. La Organización Internacional del Trabajo (OIT), define el trabajo decente como “aquella actividad productiva justamente remunerada, que se ejerce en libertad, en condiciones de equidad y seguridad y que respeta la dignidad humana”.

En ese sentido, CLAC entiende que el abordaje de Trabajo Decente como parte de las buenas prácticas laborales de su membresía incluye el trabajo en:

Estas líneas temáticas son a su vez contempladas en los Estándares Fairtrade y marcan la ruta de trabajo para la construcción de capacidades de la membresía de CLAC, con un énfasis sobre todo a las organizaciones de trabajo contratado.

Otro de los ejes clave en materia de buenas prácticas laborales tiene que ver con el desarrollo, acompañamiento, formación y fortalecimiento de la Red Latinoamericana de Trabajadores de Comercio Justo, que es la estructura política que da voz y representación a los trabajadores de comercio justo de forma que puedan expresar e incidir en acciones que tengan como fin la consolidación de condiciones de Trabajo Decente.

El enfoque de CLAC en la promoción de buenas prácticas laborales implica acciones como:

• Promover el desarrollo de estrategias y políticas institucionales que promuevan mejores prácticas a favor del trabajo decente, tanto en la organización como en su membresía.
• Realizar evaluaciones de riesgos en las diferentes áreas vinculadas a Trabajo Decente
• Asumir el compromiso de respetar y remediar como parte de las obligaciones de la membresía y el sistema Fairtrade.
• Incorporar indicadores de Trabajo Decente a los sistemas internos de gestión, que garanticen el monitoreo y seguimiento continuo de los mismos.