El génesis del azúcar de Comercio Justo en Latinoamérica y el Caribe se da en los años 90. Ese maravilloso evento ha generado que hoy en día la familia azucarera certificada se haya expandido por 11 países y que agrupe a más de 30 organizaciones de pequeños(as) productores(as) que producen caña de azúcar, tanto orgánica como convencional en la región.
La naturaleza ha provisto a la caña de azúcar con muchas posibilidades de derivados, lo que abre opciones para los productores; puesto que puede producir azúcares centrifugados, no centrifugados y otros productos como biocombustibles, panela y bebidas espirituosas como el ron.
Estructura
CLAC ha constituido una estructura organizativa integrada por todas las Organizaciones de Pequeños(as) Productores(as). A su vez todas las organizaciones de cada producto, de los diferentes países, se han unido y creado una red de productores(as) de caña de azúcar y sus derivados, conocida como Red Azúcar. La cual consolida su destino democrático en Asamblea General.
Estrategia
En CLAC se ha definido una estrategia proactiva e integral amparada en la teoría del cambio que está vinculada por una serie de líneas estratégicas, tales como: fortalecimiento y desarrollo organizacional, producción, mercado, gestión de cumplimiento de los criterios Fairtrade y ejes transversales. Dicha estrategia esta enlazada con las Redes de Productores de Asia y África.
Las líneas estratégicas son la base para crear acciones dinámicas y un ambiente facilitador de un servicio sistémico al cañero y superar el reto azucarero de bajas ventas y caída de precios, mediante:
- Fortalecer el perfil organizacional y humano de la Organización de Pequeños Productores que permita competitividad y una acertada toma de decisiones.
- Maximizar el cumplimiento de los los criterios Fairtrade.
- Asegurar calidad en el proceso agroindustrial, y comercial, así como la comunicación de historias de impacto para poder alcanzar apertura de mercado y mayor transparencia.
Retos actuales
La Red Azúcar está en continua revisión y vigilancia y en la actualidad se han identificado los siguientes retos principales:
- Enfocar día a día el servicio al productor de azúcar Fairtrade en fortalecer su perfil organizacional, administrativo y estratégico, lo mismo que sus equipos humanos para enfrentar sus retos, acercarlo al mercado, encontrar alternativas de venta para el azúcar certificado mediante alianzas y preformas estratégicas que permitan mayor competitividad y sostenibilidad. Además de integrar en cada una de esas fases esquemas de comunicación e información que faciliten la integración interna y una correcta toma de decisiones, control y transparencia.
- Nuestro anhelo de superar la actual coyuntura azucarera de volatilidad en ventas y precios, con la tarea de reactivar la apertura del mercado para azúcar y sus derivados y que se vean traducidas en el incremento de ventas, mediante la valoración del principio de relación directa, a largo plazo y con valor agregado. Paralelamente, se debe consolidar la integración del industrial como parte fundamental de la transformación de la caña y del ligamen comercial con el comprador (mercado). De esta manera se puede implementar un modelo de desarrollo mediante el uso de la prima Fairtrade o alianzas con actores del modelo para incrementar el impacto organizacional, productivo, social y ambiental en los productores y sus comunidades.
Se ha conformado un equipo operativo de especialistas al servicio del productor(a) en CLAC, que busca atender una serie de necesidades de los productores directamente, a partir de la labor de Gestores de Fortalecimiento y Desarrollo para cada país. Además los procesos son debidamente coordinados por el Coordinador de Azúcar. Este equipo operativo ha modelado una mediante una hoja de ruta con las principales líneas de acción:
- Unión y fortalecimiento organizacional, administrativo y financiero de las Organizaciones.
- Integración agroindustrial.
- Producción y mercado.
- Gestión de los criterios Fairtrade y Ejes transversales de CLAC.
Servicio al productor
Nuestra misión y principal activo es el productor azucarero. Todas nuestras metas apuntan a un servicio “personalizado” al productor, en sitio, utilizando las mejores herramientas organizativas y tecnológicas. Así como adecuando nuestra labor y respetando las características geográficas, jurídicas, socio-políticas y culturales que posee cada país azucarero.
Razón por la cual y conociendo la realidad azucarera y el perfil de los productores se implementa un proceso de inclusión, participación solidaria e integración ética de forma natural y dinámica de la cadena certificada con el fin de asegurar mayor valor agregado y la sostenibilidad productiva.
Buscamos una dinámica de sensibilización con todos los actores del modelo Comercio Justo, mediante la realización de actividades tales como encuentros regionales e intercambios de experiencias entre productores(as).