El 8 de marzo es un recordatorio sobre el papel fundamental que juegan las mujeres en el ámbito productivo y económico. A través del Comercio Justo, cientos de mujeres productoras y trabajadoras han recibido capacitaciones sobre liderazgo y empoderamiento, lo que ha permitido que muchas de ellas asuman puestos de toma de decisiones en sus organizaciones.
La Coordinadora CLAC confía en el liderazgo de las mujeres en las organizaciones, una muestra de ello es la elección de una mujer en la presidencia del consejo directivo en su última asamblea, celebrada el pasado mes de noviembre de 2024 en México. Además, por primera vez se eligieron 7 mujeres en el consejo directivo, quienes representan el 47% de los 15 directivos.
Además, CLAC ha contribuido a un espacio de toma de decisiones equitativo, no solo a nivel directivo en toda la región, sino también impulsando acciones dentro de las Organizaciones de Pequeños(as) Productores(as) y trabajadores(as) de comercio justo, a través de la implementación de su estrategia de equidad de género.

“Para mí ser productora de café significa independencia y orgullo. Antes las mujeres de mi comunidad teníamos pocas oportunidades más allá del hogar, ahora cultivo mi propia parcela, genero mis propios ingresos y tomo decisiones sobre mi parcela”, destaca Norma Noelia Mejía López, productora de café de CAFESCOR, en Honduras, quien ha participado en las escuelas de liderazgo impulsadas por CLAC.
“Este trabajo no solo me genera ingresos económicos, sino también me da dignidad y respeto en mi comunidad. Las escuelas de liderazgo han sido fundamentales. Ahí aprendí sobre mis derechos, administración y técnicas agrícolas mejoradas. Lo más valioso que me enseñaron fue a usar mi voz, ahora participo en la toma de decisiones de CAFESCOR y he crecido como líder en mi comunidad”, agregó.
Con la implementación de escuelas de liderazgo para mujeres, encuentros e intercambios de experiencias, formación en toma de decisiones, aspectos productivos, entre otras iniciativas, las mujeres rurales de las organizaciones certificadas Fairtrade en América Latina y el Caribe, asumen hoy día un papel cada vez más protagónico en sus organizaciones.
Actualmente, en CLAC existe una importante participación de las mujeres en las estructuras de gobernanza, incluyendo a mujeres jóvenes tanto en el Consejo Directivo, las comisiones de trabajo, en las coordinadoras nacionales y en las redes de producto y red de trabajadores(as).
Un ejemplo de los esfuerzos por promover la igualdad de género es el proyecto BELLAS, impulsado por la Corporación de Trabajadores de Banaexport, Corbanaexport, que tuvo una visión clara de promover la igualdad de género, empoderando a las trabajadoras y creando nuevas oportunidades para las mujeres en la industria bananera. Gracias a su compromiso con la inclusión y la transformación de estereotipos, el proyecto las BELLAS se han convertido en un referente en la región de Urabá y Antioquia, demostrando que la igualdad de género y la productividad pueden ir de la mano en el Comercio Justo.


Luatany Pallares Gómez, trabajadora de banano de Banaexport, señala que el impacto de Comercio justo en su vida ha trascendido a una experiencia empoderadora: “Ser trabajadora de banano de Comercio Justo ha tenido un impacto significativo en mi vida, tanto a nivel personal como laboral. En lo personal, me ha ayudado a demostrarme a mí misma que puedo salir adelante, rompiendo con el estereotipo de depender de mis padres o de otra persona. No fue fácil dejar atrás esa comodidad y darme cuenta de que soy capaz de trabajar junto a hombres fuertes, pero también de reconocer que nosotras, las mujeres, somos igual de fuertes, e incluso más.”
Un dato interesante
Este año 2025, también marca el 30º aniversario de la Declaración de Beijing, un documento clave en el avance de la igualdad de género impulsado por los Estados para promover la protección jurídica, el acceso a servicios, la participación de las mujeres y los cambios en normas sociales, ideas y esterotipos que frenan la participación plena de las mujeres en todos los aspectos sociales, económicos, políticos y culturales.